martes, 5 de julio de 2011

Te daría mis ojos

Son escasas y raras las ocasiones en las que los adeptos del yatelodecíayo desearíamos no tener la razón. Como en la película, lo único que podría hacer es darle mis ojos para que supiera lo que yo veo. Lo que vi, en realidad. Esos ojos que un día fueron los suyos, pues ella también estuvo en el papel de espectador, como yo me encuentro ahora. Por eso no quiero intercambios, por eso quiero equivocarme y que no se reescriba otra versión de la misma historia. Porque están en lo cierto cuando comentan que segundas partes nunca fueron buenas.

No hay comentarios: